La Constitución no establece ninguna prohibición para que una persona condenada en un juicio penal se presente como candidato. Y tampoco que ocupe la Casa Blanca. En mayo de este año, un jurado de Nueva York lo declaró culpable de 34 cargos graves de falsificación de registros empresariales.Este caso surgió a partir de los llamados “pagos por silencio” realizados en 2016 para evitar que surgieran detalles comprometedores sobre su vida privada durante la campaña presidencial. El 26 de noviembre se debe conocer que condena le corresponde.